Estrategias Principales Dos enfoques de inversión flexible en renta fija para un mercado incierto Los enfoques flexibles para gestionar la renta fija pueden permitir a los inversores capear la incertidumbre y conseguir rendimientos atractivos, incluso cuando se implementan coberturas cambiarias frente al euro.
Dado que el final del programa de compras de activos del Banco Central Europeo se cierne sobre el horizonte, los inversores en renta fija europea afrontan, hoy en día, muchos desafíos. Además de los bajos rendimientos a escala nacional, hay valoraciones ajustadas y la posibilidad de que se produzca una corrección en el mercado, así como el aumento significativo a lo largo del año pasado del coste de cobertura para bonos mundiales. Si a esto sumamos el progresivo endurecimiento de la política monetaria y los conflictos políticos y comerciales a nivel internacional, muchos inversores tendrán que desenvolverse en un entorno que se percibe cada vez más incierto (véase el gráfico 1). En nuestra opinión, los inversores deberían sopesar tres enfoques: Reducir el riesgo y esperar a que surjan puntos de entrada más interesantes. En este caso, los inversores pueden optar por carteras a corto plazo o de baja duración de bonos de elevada calidad. Este planteamiento ofrece protección frente a un aumento de la volatilidad de mercado, mantiene la liquidez en cotas elevadas y conserva «munición en la recámara» para aprovechar las oportunidades que vayan surgiendo, aunque los inversores podrían sacrificar rentabilidades valiosas. Elegir duraciones de elevada calidad de entre los principales mercados de renta fija del mundo, dada su función histórica de «refugio seguro», o de cobertura durante episodios de ventas masivas en los mercados. Si bien los bonos soberanos ofrecen actualmente un rendimiento muy reducido, los títulos de deuda pública de elevada calidad (o «hard duration») presentan importantes características a largo plazo que podrían brindar a las carteras el equilibrio deseado. Adoptar un enfoque de inversión en renta fija más flexible, sin vinculación a ningún índice de referencia, con el fin de capear activamente el entorno cambiante y capturar de manera dinámica las oportunidades disponibles. Con este planteamiento, los inversores deberían determinar si su objetivo es lograr un cierto nivel de ingresos o una rentabilidad absoluta específica en un determinado periodo de tiempo. Las ventajas de la flexibilidad Los inversores que prefieren o que están acostumbrados a un enfoque de inversión en renta fija más tradicional podrían inclinarse por las dos primeras opciones. No obstante, a nuestro parecer, adoptar un enfoque flexible para gestionar los principales factores de riesgo de la renta fija, como los riesgos de duración, de crédito y de divisa podría permitir a los inversores capear el entorno actual y conseguir retornos atractivos, incluso cuando se cubre frente al euro. Además, una cartera de renta fija con orientación mundial no solo podría ofrecer diversificación geográfica, sino también un mayor número de oportunidades de generación de alfa y una mayor protección frente a pérdidas en un contexto de ralentización económica. Si bien se pueden adoptar varios enfoques de inversión flexible a escala mundial, identificamos dos estrategias diferenciadas y viables que podrían desempeñar funciones importantes en las carteras de inversión en los próximos años; los inversores deben establecer si lo que pretenden es 1) centrarse en una estrategia dinámica con un objetivo de rentabilidad absoluta a lo largo de varios ciclos de mercado, o 2) lograr un nivel constante de ingresos. La elección depende de los objetivos y el perfil de riesgo/rentabilidad del inversor. Las estrategias flexibles, como la estrategia Dynamic Bond y la estrategia Income, pueden constituir soluciones apropiadas para los inversores que intenten sortear la última etapa del ciclo económico. Invertir para obtener rentabilidades a largo plazo La estrategia Dynamic Bond pretende conseguir una rentabilidad atractiva a largo plazo, compatible con la conservación del capital, y aprovecha todo el espectro de competencias de PIMCO en los diferentes mercados de renta fija del planeta. Cabe destacar que la estrategia lleva a cabo una estricta gestión del riesgo para conseguir rentabilidades atractivas ajustadas al riesgo a lo largo de un ciclo de mercado, con una volatilidad similar a la de los bonos de los países centrales. Hemos eliminado el típico énfasis en los índices de referencia de renta fija tradicionales y, en su lugar, diversificamos las exposiciones de la cartera a los diferentes mercados mundiales de tipos de interés, crédito, volatilidad y divisas, lo que nos permite adoptar las ideas de inversión de mayor convicción de PIMCO. La estrategia tiene la capacidad de ser muy flexible. Puede combinar planteamientos estructurales y tácticos, emprender posiciones defensivas en un primer momento para luego adoptar una postura más positiva cuando el entorno de mercado cambie. Su naturaleza dinámica, su flexibilidad y su amplio rango de duración (de -3 a +8 años) permiten a la estrategia sacar partido de las oportunidades y cubrir los riesgos a través de posiciones largas y cortas que reflejan nuestras opiniones sobre los factores de riesgo fundamentales. La estrategia puede adoptar posiciones cortas en crédito, por ejemplo, cuando el entorno macroeconómico se revele muy desfavorable o cuando las valoraciones estén tan caras que resulte probable registrar rentabilidades negativas en el crédito. Hoy en día, la estrategia presenta un sesgo defensivo en duración, con énfasis en el valor relativo, y aplica un criterio selectivo en el crédito de elevada calidad. Sin embargo, cuando surjan más oportunidades en el universo crediticio, la estrategia puede reajustarse rápidamente, al tiempo que mantiene una calificación general de «investment grade» en la cartera. El gráfico 2 muestra cómo una estrategia dinámica puede orientar activamente sus exposiciones tácticas a factores como el riesgo de tipos de interés (duración). La estrategia implementa las ideas de mayor convicción de PIMCO de manera mesurada y recurre a un amplio abanico de fuentes de rentabilidad, con el fin de obtener un perfil de rentabilidad uniforme y unas escasas correlaciones con otras clases de activos. La estrategia Dynamic Bond dispone de flexibilidad, de amplia capacidad discrecional y de un mecanismo de gestión del riesgo para complementar las asignaciones a bonos de los países centrales, y está diseñada para mantenerse a flote incluso en periodos de subidas de los tipos de interés, como en esta primera mitad del año. Inversión para obtener ingresos Los inversores que buscan un flujo constante de ingresos, al tiempo que desean proteger su capital, deberían considerar un enfoque de inversión flexible en renta fija diferente. La estrategia Income de PIMCO fue concebida exactamente con esta finalidad: generar ingresos corrientes y, al mismo tiempo, conservar el capital —como objetivo secundario, la estrategia privilegia la revalorización del capital. Adopta un enfoque multisectorial con el fin de lograr su objetivo de ingresos en cualquier entorno de mercado, manteniendo en todo momento la elevada calidad general propia de la estrategia. La estrategia Income se divide en dos grandes componentes. El primer componente está integrado por los activos de mayor rendimiento, como los bonos de titulización hipotecaria no emitidos por agencias («non-agency MBS»); según nuestras previsiones, estos activos exhibirán un buen comportamiento si el crecimiento económico se revela más sólido de lo previsto. El otro componente está representado por los activos de mayor calidad, que probablemente evolucionarán satisfactoriamente si el crecimiento resulta más lento de lo esperado y, por lo tanto, actúan como un importante factor de diversificación y brindan protección frente al riesgo bajista. En la coyuntura actual, privilegiamos los bonos del Tesoro estadounidense en el componente de mayor calidad de la estrategia Income, habida cuenta de sus mayores rendimientos y de la ventaja de la Reserva Federal con respecto a otros bancos centrales en el ciclo de subidas de los tipos. Para lograr unos ingresos elevados y constantes, tratamos de identificar las mejores ideas generadoras de ingresos, en función del entorno, y ponemos el foco en múltiples fuentes de ingresos procedentes del abanico mundial de oportunidades. Para lograr su objetivo, la estrategia está estructuralmente expuesta al crédito. En estos momentos, aplicamos un criterio oportunista en crédito corporativo, con lo que favorecemos los valores relacionados con el sector de la vivienda y las compañías financieras, y adoptamos posiciones concretas en la deuda de elevada calidad de los mercados emergentes con el objeto de añadir rendimiento. También detectamos oportunidades puntuales en lo que denominamos activos «dúctiles» (que pueden doblarse pero sin llegar a romperse) que probablemente exhibirán un buen comportamiento incluso en los entornos más complejos. Al combinar los dos componentes de la cartera, la estrategia Income mantiene una amplia diversificación y evita las posiciones únicas (ya sean activos de mayor rendimiento o de mayor calidad) que determinen la rentabilidad y la volatilidad de la estrategia. El gráfico 3 ilustra la diversificación de la estrategia y cómo se ha adaptado a los distintos entornos en los últimos años. Desde su lanzamiento, la estrategia Income ha logrado su objetivo de ofrecer a los inversores ingresos elevados y constantes con una volatilidad reducida. La flexibilidad, la liquidez y la diversificación fueron los factores determinantes de la rentabilidad histórica, de ahí que estemos convencidos de que la filosofía de la estrategia es la adecuada para ayudar a los clientes a obtener un elevado y constante nivel de ingresos sin sacrificar liquidez o calidad. Conclusión El entorno actual, caracterizado por unos bajos rendimientos a escala nacional, una tendencia alcista de los tipos de interés mundiales y episodios recurrentes de volatilidad, trae complejidad para muchos inversores en Europa. La buena noticia es que existen estrategias para afrontar los mercados inciertos de renta fija de la actualidad. Si bien la limitación del riesgo de tipos de interés o la asignación a bonos de elevada calidad representan opciones viables, consideramos que un enfoque de inversión flexible representa una manera inteligente de capear las condiciones cambiantes de los mercados de renta fija. Las estrategias flexibles de renta fija de PIMCO, entre las que se incluyen las estrategias Dynamic Bond e Income, han sido diseñadas específicamente para alcanzar los objetivos de rentabilidad a largo plazo e ingresos constantes de los inversores.
Blog Perspectivas europeas: Menos riesgo de caída, aunque el entorno sigue exigiendo prudencia En 2023, será esencial hacer hincapié en una elevada calidad y liquidez cuando se asuman riesgos en las carteras, dada la intensa presión a la que sigue sometida la política monetaria.